Es un pastel cuadrado de arroz pegajoso envuelto en hojas de latania o de bananero (lo que le da su característico color verde), que contiene guisantes y trozos de cerdo salado y sazonado con pimienta. Es un plato popular en la celebración del Año Nuevo Lunar (Tet).

Banh Chung vietnamita (de 4 a 6 raciones)

Ingredientes:
- 1 kg de arroz glutinoso
- media cucharada de sal
- extracto de hojas de Dua (pueden sustituirse por extracto de espinacas)
- 500 g de judías mung
- 1 cebolla, a rodajas finas
- 200 g de lonchas de panceta de cerdo
- Sal, pimienta negra
- Un marco de madera de 40 cm x 30 cm
- Hojas de bananero

Preparación:
Aclare con agua el arroz glutinoso y séquelo bien. Añada media cucharada de sal y después remójelo en el extracto de espinacas/Dua durante 20 minutos.
Ponga en remojo las judías mung durante 2 horas en agua tibia, séquelas y retire la piel de las judías. Cocine las judías mung de la misma manera que el arroz molido y a continuación haga un puré. Mezcle este puré con la cebolla y las lonchas de panceta de cerdo. Añada sal y pimienta negra.
Coloque unos cordeles en forma de cruz en el marco de madera y después añada 3 capas de hojas de bananero. Vierta la mitad del arroz glutinoso secado y espárzalo uniformemente. Esparza uniformemente el puré de judías mung por el centro de la capa de arroz glutinoso. Vierta la otra mitad del arroz glutinoso. Doble las hojas de bananero con cuidado y ate fuertemente el cordel de bambú. Para finalizar, retire el fardo del marco de madera y cocínelo en agua hirviendo durante al menos 5 horas.


Hay dos clases de pasteles: Banh Day (redondo) y Banh Chung (cuadrado).
El pastel redondo representa el cielo y el cuadrado la tierra [los vietnamitas en ese momento creían que la tierra era cuadrada]. Las hojas de envoltura alrededor de la torta cuadrada simboliza la protección de los padres.

La leyenda del rey Hung Liên, cuenta que tenía veintidós hijos y los mandó a recorrer el planeta para que le encontraran delicias comestibles que él jamás hubiera probado.Veintiuno se fueron, pero el más joven, el príncipe Lang Lieu, se quedó en Hué, incapaz de decidir hacia dónde dirigir sus pasos. Asustado y sin saber qué hacer, Lieu se preguntaba un día y otro día y otro qué plato podría haber en el mundo que su padre, el más sabio, rico y poderoso de los reyes de la Tierra, no hubiera probado hasta entonces y dónde podría encontrarlo. Una noche, en que dormía un sueño inquieto, se le apareció un duende que le dijo: «El hombre no puede vivir sin arroz»; y le dio la receta del bánh chung. Los veintiún príncipes regresaron de sus viajes. Pero ninguno traía plato alguno que el rey no hubiera probado ya o que resultara suficientemente delicioso. Defraudado, decidió probar el bánh chung de su hijo menor. Y le gustó tanto y tanto comió de él, al haber utilizado únicamente arroz, el ingrediente básico entre el pueblo vietnamita, que le preguntó a Lieu: «¿Dónde has encontrado esta receta tan maravillosa?». Cuando el joven príncipe le contó la historia de su sueño y del duendecillo que se le había aparecido, Hung Liên quedó impresionado de la ayuda divina que había recibido su hijo y, viendo en ella una señal propicia de los cielos, allí mismo lo nombró heredero del trono.


Hanoi, 14-15-16 febrer de 2010.

Los vietnamitas llaman Têt a la llegada del Año Nuevo Lunar. Coincide en fechas con el calendario chino y se desarrolla durante tres días. Son fechas en las que muchos vietnamitas que viven en el exterior aprovechan para visitar su ciudad o para viajar a sus pueblos de origen.

Las plantas típicas de la celebración, son el mandarino (kumquat, que simboliza la buena suerte) y ramas en flor de melocotonero (durazno). Según sus creencias, mientras más frutas y flores se tengan, mayor será la alegría y felicidad en el hogar.


Las celebraciones en Hanoi se guardan para la noche. Hanoi pierde su carácter bullicioso durante el día para quedarse desierta al cerrar las tiendas, eje esencial en la vida vietnamita, que puede ser a la vez taller de motos, ultramarino, restaurante y, por supuesto, vivienda. Es habitual que en los restaurantes no haya muchos de los platos que se ofrecen habitualmente. Más allá de las seis de la tarde, cuando el sol ha caído, los habitantes de Hanoi se concentran en la parte antigua, alrededor del lago, eje central del casco antiguo de Hanoi, para asistir a los espectáculos que se celebran en el parque que lo rodea.

Durante los días previos a la fiesta, los vietnamitas se afanan en limpiar y arreglar sus casas, comprar plantas y ropa nueva y colocar banderas del país en las fachadas, consiguiendo dar un toque colorido y uniforme a esta destartalada y masificada ciudad. En las casas se colocan ofrendas a pequeñas estatuas de Buda o de una Diosa llamada PHAT BA QUAN AM. Estas ofrendas son de lo más variado: desde esas velas en forma de varillas que se clavan en recipientes llenos de ceniza hasta dinero, fruta, o la comida que se va a tomar durante el día. Es una forma de dar las gracias por los bienes que se tienen y de evitar la falta de éstos durante el resto del año, porque la creencia es que el año discurrirá tal y como ha empezado. Y esto explica muchas cosas: se felicitan, se hacen regalos, se invitan a comer mutuamente e intentan por todos los medios que en esos días la felicidad reine en los hogares.


Otra costumbre es quemar dinero en la puerta de la casa. El dinero es falso, pero su quema supone una ofrenda simbólica que pocos dejan de hacer.

También relacionada con el dinero, aunque esta vez dinero de verdad, está la costumbre de regalar pequeñas cantidades a los niños y a los ancianos. A los ancianos se les desea que puedan vivir más tiempo, y a los niños que crezcan rápido. No es dinero para gastos; es un detalle simbólico que como tal ha de ser considerado y tratado: no se puede gastar. Habitualmente se introduce en unos sobrecitos de color rojo, algunos de los cuales llevan impreso el mensaje más oído -y leído- en el país durante estos días: chúc mừng năm mới (Feliz Año Nuevo). Como dice un proverbio vietnamita, “el primer día del Tet es para los padres, el segundo para los amigos, y el tercero para los profesores”.

Para asegurarse la máxima protección contra cualquier posible correría de los demonios y de los malos espíritus, tradicionalmente los vietnamitas hacían estallar petardos para así frustrar los planes del infame diablo Na A y de su terrible esposa (que según la creencia de los chinos, comía personas en la víspera del Año Nuevo), que no pueden soportar ni el color rojo, ni los ruidos muy fuertes ni la luz del fuego.

Durante esos días la tradición para los campesinos adquiere una significación importante. Van al campo y en un surco con un arado limpian la tierra de la maleza, y piden suerte y prosperidades para las próximas cosechas; por otra parte, los comerciantes abren sus tiendas y venden un solo producto, también con el propósito de tener mejores ventas en el futuro.


Tao Quan, los tres espíritus del hogar, viven en las cocinas de las casas y todos los años, justo antes del fin de año, emprenden a lomos de grandes carpas un viaje larguísimo para visitar al Emperador de Jade.

Ocurrió hace muchos, muchos años, en la víspera de una fiesta del Tet. Un leñador, felizmente casado con una mujer muy dulce y muy hermosa, tiempo atrás había empezado a angustiarse porque creía que no sería capaz de ganar lo suficiente para que pudieran comer y no morirse de hambre... El leñador, de tan preocupado como estaba, se dio a la bebida. Como tenía poco dinero, sólo podía comprar vino de arroz para cocinar o vino de víbora...

Bebía y bebía,y ahora casi siempre estaba borracho. Miraba a su mujer y, en vez de sentir remordimientos por cómo se comportaba con ella,empezó a pensar que ella tenía la culpa de todo. Y se enfadaba a diario, con unas cóleras terribles contra su mujer, amenazándola y gritándole, y cubriéndola de improperios. De tal modo que un día, ella no pudo más y se marchó de la casa.

Pasaron unos años y la mujer volvió a casarse, esta vez con un cazador con el que fue muy feliz. Una víspera de Tet, un mendigo llamó a la puerta. El cazador no estaba: había ido a buscar alguna pieza que les sirviera para cenar aquella noche. La mujer abrió y enseguida reconoció al mendigo: era el leñador con el que había estado casada tanto tiempo atrás. El pobre hombre venía en un estado lamentable, lleno de llagas y medio desfallecido de hambre y frío. La mujer se apiadó de él y lo hizo entrar para darle algo de comer y dejar que se calentara junto a la lumbre. Pero no bien se hubo sentado, oyó que su nuevo marido, el cazador, regresaba a casa. Temiendo que pudiera enfadarse y, puesto que era fornido y muy hábil con las armas de caza, decidiera acabar con el mendigo, hizo que éste se escondiera debajo de un montón de paja. El caso es que el cazador tenía mucha hambre y había cobrado una buena pieza. Quiso que la asaran enseguida y prendió fuego al montón de paja. En cuanto se puso a arder, echó la pieza cobrada sobre el montón de paja ardiendo. El pobre mendigo, pensando que si gritaba o salía de debajo del fuego comprometería a la mujer y que el cazador, furioso y creyéndose engañado, la mataría, guardó silencio para que nada lo delatara. La mujer, comprendiendo que el mendigo callaba para salvarla, se lanzó ella también a las llamas para morir con él. Entonces, el cazador, creyendo que su amada se había tirado al fuego por alguna cosa indigna y cruel que él hubiera hecho, e incapaz de pensar en seguir viviendo sin ella, también se lanzó a las llamas. Los tres murieron abrasados. Pero el Emperador de Jade, que todo lo ve y al que esta historia de amor y lealtad había emocionado grandemente, se apiadó de los amantes y decidió que merecían ser recompensados.

«¿Qué haré para demostrarles mi agrado?»,pensó.

«Los convertiré en dioses, eso haré. Pero no unos dioses cualesquiera. Tres criaturas capaces de tanto sacrificio por amor serán seguramente quienes mejor protegerán los hogares de los vietnamitas ».

Y a los tres los convirtió en los espíritus del Tao Quan. Y desde entonces les encargó que se ocuparan del bienestar de todos los vietnamitas y les ordenó que vivieran en las cocinas, cerca del hogar, que es donde se encuentran la paz y la felicidad. Cada fin de año, los Tao Quan cabalgan a lomos de los grandes peces en su largo viaje hasta el Cielo. Allí le contarán al Emperador de Jade los acontecimientos del año transcurrido e implorarán que derrame buena fortuna y mejores dones sobre todas las familias. Por eso, siete días antes del Tet Nguyen Dan, los vietnamitas preparan altares con comida y agua y flores para que los Tao Quan no pasen hambre ni sed durante el largo viaje, y sueltan carpas en los lagos y ríos, de modo que, a caballo sobre sus lomos, les resulte más fácil y descansado el camino.

Cada fin de año, los Tao Quan regresan a la Tierra y, en la medianoche del último día, todos los problemas y las penas y las desgracias quedan atrás, porque los tres espíritus han convencido al Emperador de Jade de que no vale la pena que las tristezas pasen al nuevo año.



Des de Hanoi, 12 de febrer de 2010.

Hoa Lu, sede de la capital del siglo X, es un antiguo reino vietnamita independiente llamado Dai Co Viet, al noroeste de Ninh Binh. Los palacios reales fortificados de los reyes Dinh y Le se reducen actualmente a restos arqueologicos, pero sus templos dinasticos, copias del siglo XVI de los originales del siglo X, aun se conservan en un valle estrecho de colinas de piedra caliza cubiertas de bosques.

Tam Coc: conocida como la Bahía de Ha Long del interior, es una de las maravillas de Vietnam. Tam Coc significa 3 cuevas, ya que se atraviesan 3 cuevas (por el rí­­o Ngo Dong, a través de las cuevas de Hang Ca, Hang Giua y Hang Cuoi) en un paseo entre montañas de piedra caliza y arrozales de ida y vuelta en barca de remos de unas 2 horas de duracion por el río Ngo Dong. El paisaje es de una gran serenidad. Los remeros (en su maoría remeras) usan la técnica tradicional, es decir, reman con los pies.







Des de Hanoi, 10-11 de gener de 2010.

Ante el puerto mas importante del norte de Vietnam, Haiphong, se despliega la bahía de Vinh Ha Long.

La Bahía de Ha Long es uno de los pocos lugares en el mundo donde aún puede tener la suerte de recrear su vista con la hermosa silueta de un sampán chino navegando contra el sol en unas aguas que parecen arrancadas de un cuento mágico y milenario.

Probablemente el paisaje más fascinante de Vietnam. Una apacible y bellísima bahía que abarca 4.000 km2 salpicados por más de 1600 islas e islotes de roca caliza, muchos de ellos sin nombre. Las extrañas y espectaculares formaciones rocosas que sobresalen en el mar y las numerosas grutas han creado un mundo encantado que permanece ajeno al paso del tiempo. El paraje fue incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en 1993 como "belleza natural".


Ha Long significa «dragón descendente», un nombre que procede de una leyenda local. El Emperador de Jade ordenó a un dragón celestial y su prole que frenasen una invasión proveniente del mar. Los ingeniosos animales escupieron trozos de jade que se convirtieron en islas maravillosas y farallones cársticos, y de ese modo lograron hundir los navíos enemigos.
Según otra versión, cuando el dragón bajó a la bahía para domesticar las corrientes marinas y se sumergió en el mar, los fortísimos coletazos que daba abrieron profundos tajos en la montaña al tiempo que el nivel del mar subía y el agua inundaba las grietas, de forma que sólo emergieron los picos más elevados. Sin embargo, lo más probable es que hace unos cuantos millones de años, Ha Long fuera una inmensa meseta horadada por el agua de lluvia. Inmensas masas de roca caliza se dasgajaron, dejando en pie sólo los peñascos más duros, expuestos después a la acción del viento y el mar.

Visita a la Cueva Sorpresa. Todas las cuevas conocidas poseen su propia leyenda. Incluso los modestos escollos de piedra caliza reciben caprichosos nombres por parte de los pescadores; son nombres como el Perro o la Tortuga o el Sapo, impuestos por el extraordinario parecido de la roca dolomítica con las formas de estos animales.

Puesta de sol y amanecer desde el junco...



Des de Sapa, 6-8 de febrer de 2010.

Lao Cai: se encuentra al norte del país, y limita la República Popular China.

Tavan: Para llegar se atraviesa un paisaje de arrozales en bancales. Gran poblado habitado por los day, los hmong y los dao rojos. Cuenta con unos 3000 habitantes, 400 casas y 6 aldeas.

Lao Chai: poblado habitado por los dao rojos (en la parte baja, con un pañuelo rojo en la cabeza y una parte del pelo delantero afeitado) y los hmong negros( en la ladera de los montes, vestidos de azul oscuro y a veces con un peine en el pelo).

Bac Ha: mercado en domingo. Mucho más típico y auténtico que el de Sapa.

Los h’mong flor van vestidos con ropa de colores y un pañuelo rosado en la cabeza.

Cat Cat: poblado hmong. Hay un camino que desciende hasta el río Muong Hoa (cascadas), donde está la central hidroeléctrica construida en tiempos de los franceses (hoy cerrada). Los hmong utilizan el agua de lluvia para sus necesidades personales y se lavan en el río. Después del puente suspendido que cruza el río, el sendero asciende por la vertiente opuesta y conduce a un segundo puente.






Referencias extraidas de la guia del Trotamundos.



Desde Hanoi, 6-8 de febrer de 2010

A 1650m de altitud, en un hermoso circo de montañas salpicado de aldeas, éste es el llamado "país azul". La ciudad está rodeada por arrozales en bancales, espléndidos paisajes y aldeas rurales.



La ciudad fue un campamento militar en 1912 (sanatorio y estación meterorológica) y después se convirtió en una estación termal de montaña (fundada por los franceses en 1922).

Los hmong negros, mayoritarios, se reconocen por la especie de polainas con que se cubren las piernas y por sus turbantes azules.


La frase más repetida en estos días: "Madame, buy something for meeeee!!"

Iglesia: vestigio de la presencia francesa. La plaza de la iglesia era el lugar donde los muchachos de las minorías étnicas cortejaban a las chicas.

Gran mercado de Sapa: Hay un edificio reservado a las minorías étnicas. A este mercado acuden a vender sus productos la mayoría de las etnias de las región.

Montaña Ham Rong (o dragon's Jaws Mountain): Pequeña montaña que domina la ciudad, y cuya parte inferior ha sido transformada en parque público. Jardín de las Orquídeas. Siguiendo por el sendero se llega a unas casas sobre pilotes que albergan un musero sobre las etnias de la región. La cumbre del monte Ham Rong está a 1800m.


Referencias extraidas de la guia del Trotamundos.



4-5 de febrer de 2010.

Lago de Hoan Kiem: Situado en el centro del casco antiguo, es el principal de los muchos lagos y embalses que pueblan Hanoi. Su bello nombre significa "El Lago de la Espada Restituida".
En el medio del lago, en una pequeña isla artificial se encuentra "La Pagoda de la Tortuga" en honor a la leyenda.

Templo de Ngoc Son (Montaña de Jade): Este templo del siglo XVIII consagrado a la memoria del genio de las letras Van Xuong, al precursor de la medicina La To y al gran vencedor de los mongoles en el siglo XIII Trang Hung Dao, destaca por la tortuga disecada. Esta extraña momia fue encontrada en un lago por lo que según la tradición popular, es la misma que protagonizó la "Espada Restaurada".

Al templo se llega por un romántico puente de madera roja llamado "Puente del Sol Naciente", que une el templo con la tierra firme.

Junto al puente se halla un obelisco de 9m de altura, la torre del Pincel (donde 3 caracteres chinos proclaman "un boligrafo para escribir en el cielo azul") y el pórtico del Escritorio, un homenaje a la literatura.

Museo del Ejército: Un pequeño museo para la vanagloria de los vietnamitas. Lo mas interesante es la Torre de la Bandera Cot Co, único vestigio de las fortificaciones construidas a partir de 1805. Es uno de los pocos restos de la cuidadela del emperador Gia Long de principios del siglo XIX, donde la bandera nacional sustituye hoy en dia a la de color amarillo del emperador.

Templo de la Literatura: Construido en el año 1070 por orden de Ly Thanh Tong, es uno de los edificios del patrimonio histórico vietnamita más importante. Dedicado a Confucio, en el año 1076 se convirtió en la primera universidad de Vietnam. Aquí se formaban los "mandarines" siguiendo las reglas del confucianismo. El "Van Mieu" es un templo con forma rectangular de considerables dimensiones. Está divido en cinco patios. En el primero se encuentran las 82 estelas de piedra sobre tortugas marinas y decoradas con inscripciones. Las "Joyas de Van Mieu", como se las conoce popularmente, honran la memoria del millar de graduados de la universidad pues las tortugas es el símbolo de la larga vida de los eruditos mandarines. Cada estela muestra los resultados de unas pruebas estatales que se celebraron en la Academia Nacional entre los años 1442 y 1779 y ofrecen varios detalles biográficos de los candidatos que las superaron con éxito. En el cuarto patio están las cuarenta columnas lacadas en color rojo y en el quinto la estatua y el santuario de Confucio, patrón de la universidad.

En el Templo de la literatura hay una campana por ser templo y un tambor por tener estudiantes.

Chua Mot Cot: Construida en los primeros años del siglo XI, su nombre significa "Pagoda del Pilar Único". Según una leyenda, fue construida por Ly Thai Ta como agradecimiento a la diosa Quan Am. El monarca, que no tenía heredero varón, vio en sueños a la diosa sentada en un loto que le tendá un niño pequeño. Así que se casó con una hermosa campesina a la que había conocido en su jardín y tuvo el hijo deseado. Se levantaba sobre un solo pilar de más de un metro de diámetro, de ahí su nombre, y debía evocar un loto. El edificio actual es una reconstrucción del original pues éste fue destruido en 1954 por tropas francesas.

Lago del Oeste: Sus trece kilómetros de perímetro ha hecho que popularmente se le conozca como "el Gran Lago". Antiguo cauce del río Rojo, tambén lo llaman el "lago de los enamorados" porque la parte baja es uno de los lgares de paseo preferidos de las parejas. Según cuenta la leyenda, un dragón excavó un enorme agujero para rellenarlo con agua y vencer al zorro de nueve colas, su enemigo. Otra versión totalmente distinta afirma que un pequeño búfalo pensó haber oído bramar a su madre al sonar el tañido de una campana y excavó este inmenso lago en su búsqueda.
Al otro lado, separado por un dique (Thanh Nien), se halla el pequeño lago de la Seda Blanca (Ho Truc Bach). Su nombre proviene del reformatorio de concubinas reales que se encontraba aquí en el siglo XVIII, pues a eso se dedicaban las mujeres, a tejer seda finísima como castigo.

Pagoda de Tran Quoc: Construida en 1639, es la pagoda más antigua de la capital y una de las más típicas de Vietnam del Norte. También llamada pagoda "defensa de la Patria", es objeto de una enorme devoción popular.

Templo de Quan Thanh: Consagrado al dios del Norte (Tran Vo), el genio guardián del norte, fue construido entre los siglos I y III en tiempos de la dinastía Ly. En 1677 llegó al templo la impresionante imagen de Buda, construida en metal. Pesa más de cuatro toneladas.

Catedral de San José: La catedral es el principal edificio cristiano de Hanoi y fue construida en 1886 en estilo neogótico.

Mercado de Dong Xuan: Construido por los franceses, se incendió en 1994 y se ha reconstruido respetando la fachada original. Es uno de los lugares con más ambiente de la ciudad donde se puede comprar desde la artesanía y las reproducciones de antigüedades, hasta las últimas innovaciones tecnológicas.

Museo de Etnografía de Vietnam: El gran vestíbulo circular pretende simbolizar la unidad de las pobalciones representadas, un objetivo ambicioso cuando se sabe qu Vietnam cuenta con 54 etnias repartidas entre llanras, altiplanos y montañas. Se exhiben unos 2500 objetos cotidianos de estos pueblos, vestidos, instrumentos musicales y pinturas rurales, junto a vitrinas temáticas sobre tejidos, cerámicas y otras actividades artesanales locales. En el terreno que lo rodea se reproducen poblados típicos a partir de casas originales.


Marionetas de agua: Se trata de un arte con varios siglos de antigüedad y cuyo origen está legado al mundo campesino, al agua y a las fiestas relacionadas con las actividades agrícolas (primavera, siembras, cosechas,...). A través de sus personajes se expresa el alma del arrozal vietnamit con sus tradiciones, rituales, animales domésticos, dioses y genios diversos. Como preámbulo del espectáculo dan un pequeño concierto en el que presentan los insrumentos tradicionales que pondrán ritmo al espectáculo.

Referencias extraidas de la guia del Trotamundos.